La Opinión, 1 de agosto de 2013
El nacionalista Ricardo Melchior, que lleva 26 años en el Cabildo de Tenerife, dejará de ser presidente de la Corporación insular el próximo mes de septiembre para dar paso al número dos de Coalición Canaria (CC) en la institución, Carlos Alonso. Lleva el bastón de mando desde hace 14 años y considera que ha llegado el momento de ser sustituido por savia nueva, con "capacidad para pensar estratégicamente y de sacrificio". Afirmó, no obstante, que seguirá activo en política y apoyando a su partido y a los tinerfeños cuando sea necesario.
–¿Qué le diría a aquellos que piensan que usted solo ha recogido los frutos de Adán Martín, como ha dicho Isaac Valencia, alcalde de La Orotava?
–No. Isaac Valencia no ha dicho eso y lo tengo por escrito.
–Le puedo asegurar que sí lo dijo, yo le hice la entrevista y se transcribió de forma literal.
–Me pareció muy feo sinceramente, pero muy feo. Me había olvidado. Tanto, que si lo llego a saber antes, probablemente no le doy la entrevista, porque me parece tan feo... Uno se puede equivocar, pero después ha de corregir, sobre todo si ofende a una persona. No sé si es consciente de lo que estoy diciendo [enfadado].
–Valencia pidió disculpas a los vecinos de Añaza...
–A mí también. La nota que me envió pone: "Cierto es que dije y confirmo que valoro mucho el trabajo realizado por su antecesor Adán Martín, al igual que el propio Ricardo reconoce, y que tuvo y planteó interesantes proyectos que luego se hicieron realidad en la siguiente etapa, al igual que yo [Isaac Valencia] recogí frutos de semillas sembradas por Francisco Sánchez. Que sinceramente, y él lo sabe, admiro y reconozco la labor que ha realizado Ricardo Melchior (...) No es que diga esto ahora para quedar bien con él. Quise hacer hincapié en la labor de Adán Martín, pero sin restar importancia a la de Ricardo Melchior (...). Es cierto que hay frases que pueden dar malos entendimientos según el contexto".
–¿Entonces, continuamos con la entrevista?
–Sí sí, podemos seguir, pero no fue muy afortunada, se lo digo sinceramente, porque eso duele. ¿Que no trabajo? Por favor... ¿Se imagina que dijera ahora que no tiene usted ni idea de periodismo? ¿Le gustaría eso?
–Si quiere le pongo la grabación de Valencia.
–No, no.
–¿Cuál es el proyecto que no ha sacado adelante y que le deja una espina por no poderlo lograr?
–De no poderlo lograr no, de proyectos que me hubiesen gustado que ya estuviesen funcionando y que no se han ejecutado en su totalidad. Como los dos hospitales. Ha sido una lucha increíble y algún día escribiré un libro sobre el tema. Con muchos puñetazos sobre la mesa y reuniones. Y eso agota, pero no me paran. Por eso me ofende mucho lo de que solo he recogido frutos. Segundo, el cierre del Anillo, pero si el que tiene que pagarlo no lo paga... Si para el resto de España la financiación corre a cargo del Estado, ¿por qué aquí lo tiene que pagar el Cabildo? Que dé el dinero él que para eso se ha suscrito a un convenio. No es culpa nuestra, hemos hecho todo nuestro trabajo. Yo, por lo menos, no tendría la caradura de, si paro un proyecto, decirle al que se lo paré que por qué no lo hace él. Eso es de auténtica caradura. Con el tren, tenemos un compromiso con el Estado pero no lo cumple. Aún así lo vamos a sacar porque eso no quiere decir que la Unión Europea no lo haga.
–¿Cree que los tinerfeños entienden la importancia que implican los trenes con la crisis que hay y al pensar, tal vez, que ese dinero puede destinarse a reducir el paro?
–Lo he dicho mil veces, pero lo repetiré otras mil si fuera necesario. El tren no compite con otras áreas, sino con otros trenes. Si nosotros no lo hacemos, se hará el tren Zaragoza-Huesca. No es un dinero que venga para otras cosas, sino exclusivamente para este tipo de proyectos. Nunca hemos cogido nada, ni siquiera para el tranvía, y por lo tanto ya nos corresponde. Necesitamos inversión porque genera puestos de trabajo, que las actividades sean más competitivas y que nos podamos mover más rápido contaminando menos.
–¿Será un problema para las elecciones de 2015 que Carlos Alonso no sea tan conocido como usted? ¿Cree que debería de haber un candidato con más experiencia o más conocido por los tinerfeños?
–Carlos Alonso está en un grado de conocimiento bueno y a lo largo del próximo año y medio eso subirá muchísimo. Exceptuando a Paulino Rivero, Ani Oramas, Fernando Clavijo, y el menda, y metiendo ahí a todos los partidos, puede ser que me deje a alguien, los siguientes tienen el mismo grado de conocimiento que Carlos Alonso, y eso irá creciendo. Eso es uno de los motivos por los que me retiro antes de finalizar el mandato, aunque para mí lo más fácil sería acabarlo. Sin embargo, por mi obligación con el pueblo tinerfeño, al que le debo todo, quiero que en los próximos años, que serán difíciles porque tardaremos en salir de la crisis, haya alguien con capacidad para pensar estratégicamente y con sacrificio; capaz de formar equipo y con coraje intelectual. Para él sería más fácil irse a Bruselas, pero se queda aquí. Eso es muy de agradecer. Debo de conocer en España a unos 1.000 políticos, entre ministros, diputados, alcaldes... y no conozco 10 que lleguen a la altura de Carlos Alonso, con presidentes de gobiernos incluidos.
–¿Tiene ya una fecha especial en la que le gustaría despedirse?
–Bueno, sí la sé, y lo sabe Carlos Alonso y nadie más.
–Será un secreto, entiendo.
–Sí, más que nada porque tampoco contribuye en nada y no quiero que se pongan nerviosos. Hay de todo en las reacciones. Hay quien se alegra, pero hay más que sueltan sus lagrimillas y yo no quiero que la gente se entristezca.
–¿Será a principios de septiembre, finales...?
–Bueno, da igual, qué más da.
–¿Dejará la política definitivamente o...?
–No, dejo el Cabildo, pero no la política.
–¿Seguirá activo entonces?
–Seguiré activo y apoyando en todo. Si me necesitan en el Cabildo ahí estaré. Si cualquier ciudadano de Tenerife quiere mi consejo, mi punto de vista, lo que fuera, también. Siempre me muevo por la calle, camino y hablo, siendo presidente o no. Mi conducta en ese sentido no ha cambiado.
–¿Le gustaría ejercer algún tipo de cargo que no implicara tanta responsabilidad?
–No le tengo miedo a la responsabilidad. No vuelvo a ser candidato al Cabildo porque llevaría 28 años si terminara el mandato. Ya está bien y hay que dar nuevas oportunidades. Estamos de forma transitoria y lo tenemos que tener claro todos. No me presento como candidato en la Corporación insular y tampoco al Gobierno de Canarias, para que no haya dudas...
–¿Y a alcalde?
–No me lo he planteado, sinceramente, pero lo que sí he dicho es que si no me voy a presentar al Cabildo, aunque es lo que me gustaría, no tengo derecho a terminar el mandato porque sé que le hago un favor al pueblo y a mi partido.
–¿Habrá reorganización de áreas cuando se vaya?
–No creo que haya muchas. Algo tiene que haber siempre porque lógicamente yo valoro mucho a Carlos, pero no somos iguales. Tiene cosas que yo no tengo y yo a lo mejor tengo alguna que él no tiene. Por algo está de número dos en la lista, no es casualidad, y las cosas importantes y estratégicas de organización siempre las hemos consultado con el equipo de Gobierno y él ha estado siempre sentado a mi derecha.
–Se dice que a CC le interesa el área de Carreteras.
–Nosotros suscribimos un pacto con el PSOE y se va a cumplir plenamente. Otra cosa es que en el acuerdo estén lo suficientemente claras otras cosas, pero no habrá ningún tipo de conflicto. Antes me refería a la organización interna. Carlos tiene la capacidad suficiente y la experiencia como para tomar las decisiones correctas.
–La deuda del Cabildo es casi el doble que la del resto de corporaciones insulares juntas. ¿Qué se ha hecho mal?
–No se ha hecho mal. El Cabildo tiene más actividad que el resto. El secretario de Estado, Antonio Beteta, dijo que los cabildos, y se refería a los de Tenerife y Gran Canaria, son administraciones públicas ejemplares; sus cuentas son analizadas con todo tipo de detalles y son un ejemplo. Aquí, las empresas de la institución ni son ficticias ni los miembros del consejo de administración ganan sueldos, sino que desarrollan nuestra Isla. Por eso, trabajan casi 50.000 personas más que en la isla de enfrente porque, fundamentalmente, en la maquinaria para activar la economía está el Cabildo. Si no estuviera, pues tendríamos 30.000, 40.000 parados más, y eso es una labor muy importante. La institución siempre ha sido ejemplar. No ha habido ni un escándalo. ¿Conoces a alguna administración que en 50 años no haya tenido ningún escándalo?, ¿una administración que interponga el interés de la Isla al interés partidista? No.
–Ha critico medidas y acciones del Estado. ¿Discrimina a Canarias y, en concreto, a la Isla?
–El Gobierno no lo está haciendo nada bien, y lo dice la opinión generalizada de la Unión Europea. El anterior tampoco lo hizo bien. Madrid sabe nuestros problemas gobierne quien gobierne, pero no los entiende. Dos puntos que distan de un kilómetro. Si en Madrid quieres hacer una carretera ahí tienes que hacer 1,2 kilómetros, mientras que en Tenerife 1,8, casi el doble. No puedes decir que como tienes tantos habitantes te toca tanto en carreteras. No, nos estás discriminando. Las vías nuestras cuestan mucho más. Eso es entender el problema; lo mismo con el agua, agricultura, la lejanía... Eso no se ha conseguido nunca. Tal vez ha habido algún ministro que lo ha entendido en un momento determinado, pero a los cinco meses lo cambian y tienes que volver a explicarlo. Es muy triste.
–¿Ni siquiera el ministro José Manuel Soria, que es canario?
–Soria no entiende nada. Es un tema que prefiero no tocar. Mira que conozco bien a Soria y sé cómo piensa, cómo funciona y lo eficiente o no que es. La única forma de que lo entiendan es obligando a que lo entiendan, y no haciendo huelgas impresionantes ni insultando en prensa, sino tener los votos suficientes en el Congreso y en el Senado. Si los canarios tuviésemos más diputados y senadores, probablemente lo entenderían sin tener que armar bronca. Eso es el error histórico. Nuestros representantes, en donde radica la soberanía popular, ¿cuántas veces han abierto la boca? Si estás en el partido del Gobierno te callas e incluso intentas defenderlos; intentan engañar a nuestra gente.
–¿Si el PP estuviera en el Gobierno insular las negociaciones con el Estado, o incluso la financiación, serían mejores?
–No quiero pensar que puedan ser mejores, porque eso sería decir que el PP es antidemocrático. Rajoy no ha sido elegido para que favorezca a las personas d Valencia, por ejemplo, si son los que más le han votado, sino para defender y representar a todos los españoles, no solo a los que le apoyaron. Por tanto, yo te defiendo si tú me votas y si no no, eso va contra el primer principio de la democracia. No lo quiero ni pensar.
–¿Cree que los gobiernos populares de otras comunidades autónomas o municipios defienden a sus vecinos?
–En algunos otros territorios sí, como en Valencia y Baleares. En Canarias no hacen caso. Cuando les afecta algo, como la minería en Asturias, los populares se suman a la manifestación, y aquí se callan la boca, no se atreven ni a moverse. Es lo de la foto de Alfonso Guerra; quien se mueva no sale, y están todos ahí porque es lo que quieren, estar en la foto.
–¿Entonces el Partido Popular en la Isla no protege los intereses de los tinerfeños?
–El PP de Tenerife es obediente con lo que diga el PP de Madrid. Si el PP de Madrid dice que no se dé nada para esa tierra, ellos se callan la boca. Ha habido una senadora que está dentro del grupo que dijo que no estaba dispuesta y se fue, por lo menos tuvo un gesto, pero los otros... Lo único que les interesa es votar si le dicen A y no sirven para nada, porque eso es apretar un botón. No intervienen, no argumentan.
–El pacto del Cabildo en la Palma (CC-PSOE) parece que ya se ha roto. ¿Ocurrirá lo mismo aquí cuando usted se vaya?
–No, por qué. Cada isla tiene su motivo de por qué pactaron y por qué no pactaron y tiene sus negociadores. Aquí está muy estable y hay muy buen entendimiento y estoy contento con todos ellos. No veo ningún motivo. No creo que haya ningún problema.
–¿Qué tendría que pasar para que se rompa?
–¿Y por qué se va a romper?
–A veces se rompen... ¿No existe la posibilidad en ningún caso?
–Posibilidad siempre existe, igual que hay una posibilidad de que me dé un infarto y me muera. Siempre hay, pero lo veo absolutamente poco probable, porque no hay motivos.
–Casi todas las mociones que se han presentado en los plenos se han aprobado con un acuerdo constitucional e incluso los presupuestos fueron apoyados por unanimidad. ¿El PP ha tocado en la puerta de CC en alguna ocasión para intentar entrar?
–El PP sabe perfectamente, porque nos conocemos mutuamente muy bien, que para tocar en esta puerta y entrar hay que tratar los temas con honestidad y seriedad; analizar las cosas no pensando en el PP y en la financiación, sino en el futuro de Tenerife. Si no está dispuesto a asumir eso, pues que no toque la puerta.
–¿Qué opina sobre el ´caso Bárcenas´?
–El caso Bárcernas es una auténtica vergüenza e introduce en una época de crisis un grado de desmoralización en toda la sociedad que es triste. El prestigio de España fuera del país está por los suelos. Fuera, a todos los españoles nos ven como corruptos o presuntos corruptos, cuando los corruptos son 20, 100, 200..., no sé. Tengo muchos contactos en Europa y puedo asegurar que el tema es muy triste; falta de credibilidad total. Rajoy, si no quiere pasar a ser el peor presidente de España, tiene que actuar. En el país hay gente muy trabajadora y que son ejemplos, no los 20 golfos que hay.
–¿Ve apropiado que empresarios financien partidos políticos de forma legal?
–Sí, veo adecuado que un empresario financie un partido siempre y cuando lo haga en el marco de la legalidad
